ACTITUD - MÁS ALLÁ DE LO ESTABLECIDO

Después de lo que he escrito sobre la búsqueda de un sonido propio desde los aspectos técnicos de forma bastante superficial como una suerte de guía a tener en cuenta para quienes estén interesados en la realización de proyectos musicales identitarios ligados al Black Metal, me encuentro nuevamente abordando el tema desde una perspectiva que había dejado de lado en artículos anteriores para que no se hicieran más tediosos para el lector. Debo admitir que el tema que abordaré es más complejo de llevarlo a cabo ya que, apelo a la individualidad de cada uno, por lo que, lo que funcione o haga sentido para uno, no lo será para el otro, más allá de que encontremos puntos comunes.

Llevo un buen tiempo intrigado pensando en la situación actual de la escena metalera en donde a pesar de estar en un momento donde los festivales abundan, nuevas bandas nacen cada día y la experimentación musical está a la orden del día, jamás me había sentido más alejado de la música que siempre me ha apasionado como ahora. Más de una vez culpe a la edad y a no entender que las nuevas modas no están hechas para mí, pero ¿Por qué me podía identificar tanto con las bandas de antaño si yo aún no había nacido para esos tiempos? La respuesta a eso es un cliché, pero no deja de tener razón, esas bandas tenían actitud. Una actitud acorde a su tiempo y al contexto en el que se veían envueltos, tanto la estética como su sonido era propio de su época lo cual le daba autenticidad, se podría decir que es aquí donde reside el “alma” de la música, la sinceridad reflejada en la propuesta que se ve y se oye. Entonces debemos saber que cada época va a tener su propia actitud de acuerdo a las nuevas generaciones de jóvenes en donde si bien lo viejo se mantiene van a nacer nuevas propuestas musicales dentro del metal: Heavy, Thrash, Death, Black, Aggro (nombre que se le daba al Nu metal en Chile), etc. Se puede estar o no de acuerdo con estas nuevas tendencias, pero no se puede negar que fueron el “soundtrack” de varias generaciones de jóvenes que encontraban en estas nuevas vertientes una forma de expresar su individualidad, lo que nos lleva a la siguiente pregunta ¿Cuál es la actitud del metal actual?

Los tiempos han cambiado, la corrección política a pesar de perder fuerza continua muy presente en los jóvenes y una nueva camada de metal extremo acapara los festivales, pero aun así no logro identificar que nos quieren decir las bandas. Todo es tan plástico, desde su sonido a su estética, no hay nada de lo que puedas decir “esto representa a una generación”, todo es un producto hecho para el consumo rápido, pero sin la valentía de decirlo, sino más bien en una suerte de camuflaje moralmente correcto de decir algo sin decir absolutamente nada. Tomemos de ejemplo a las bandas de Glam, siendo un género comercial nos decían abiertamente querer llegar a la cima, tener un hit y disfrutar de los placeres que les daba el dinero Sexo, Drogas y Rock n Roll ese fue el sueño de muchos jóvenes de esa época y hasta el día de hoy de muchos viejos que jamás dejaron la adolescencia. Así cada encarnación del metal tenía sus propias reglas no escritas y fueron importantes en su tiempo, si bien existen bandas que aún mantienen vivo el sonido y la estética antigua, estas no son más que intentos de capitalizar la nostalgia que es algo que en realidad disfruto bastante, pero vamos al punto de lo que pasa actualmente con el metal que es promovido por la industria musical.

No soy el primero y no seré el último en criticar el mal llamado Metal Moderno, aunque no me enfocaré en los aspectos musicales ni técnicos, sino más bien en que representa para las generaciones actuales. Si bien en un principio creía que toda esta nueva ola de metal carecía de una conexión genuina con los metaleros de esta generación, me di cuenta que es todo lo contrario cuando invertimos el orden de los factores, no es el metal el que moldea a los jóvenes de hoy, sino al revés, es esta generación de la post deconstrucción la que ha creado un metal carente de significado y actitud, estamos viviendo la absorción del metal por la industria del pop. Se ha adoptado una estrategia Pop para promocionar el metal y las bandas en vez de buscar la autenticidad, han caído de lleno en las manos de una industria que al igual que el pop busca un single rápido y sin trascendencia, lo único que importa es la cantidad de reacciones en redes sociales de gente “no metalera” al single del momento, poner alguna chiquilla haciendo guturales o cualquier banda con un sonido “brutal” para recibir reacciones positivas, ya que es casi imposible sobrevivir a la crucifixión en internet si algo no te gusta. Esto tristemente nos lleva al consumo fugaz, nada tiene valor, pero todo tiene un precio, las bandas crean para las visitas fugaces en YouTube, así como quienes reaccionan a ellas también. Esta es la actitud de la generación actual, el consumo rápido de la cultura del cliente siempre tiene la razón donde no es solo la industria la que nos inunda con música plástica, sino más bien es el metalero cual cliente que hace un berrinche cuando se demoran en su pedido exige que se le alimente constantemente, porque no importa que te den, lo que importa es que se vea bien, huela bien y sea rápido. Esta es la generación sin actitud la generación de la post deconstrucción en donde se pierde el sustantivo y solo queda el verbo consumir, como dije anteriormente nada tiene valor ¿Cómo es posible que festivales que nos presentan a las grandes bandas del metal actual, estas no puedan llenar teatros de poco más de 1000 personas por si solas? Es porque la generación actual no lo pide, la conexión con la música es de mero cliente y servicio, se consume solo porque es de fácil acceso y dudo que estas logren general algún tipo de nostalgia pasados los años a diferencia de los géneros clásicos incluyendo al Aggro (Nu metal).

Después de todo el resumen sobre la decadencia actual del metal en general y la falta de actitud de esta generación me veo en la obligación de hacer la siguiente pregunta ¿Cuál es la actitud que debemos tomar aquellos que nos dedicamos a crear un metal identitario o militante? La respuesta es sencilla pero el concepto es complejo de explicar y se llama Sinceridad. No existe nada más original que ser tú mismo y la música que haces debe ser una expresión de tu individualidad. Desde los riffs, las letras, la estética y la forma de estructurar una canción, todo eso debe ser una expresión sincera de tus gustos lo que te llevará incluso a desafiar los canones de la música que aspiras a crear llevándola a evolucionar a pesar de la negativa de muchos puristas que se niegan a salirse de los moldes debemos admitir que la evolución del metal nos guste o no es lo que lo mantiene con vida y eso es lo que propongo, que la evolución sea una forma de expresión individual y no el mero capricho de sonar diferente o mantener lo puro sin ninguna propuesta real. Acá es donde entra la mirada hacia el el metal patriótico y el nsbm, de los cuales veo poco o nada de una propuesta que represente a nuestra identidad como nación, desde las patéticas bandas hechas por Inteligencia Artificial hasta la adopción, aunque lo nieguen del nazi de Hollywood, en ambas expresiones veo una necesidad enfermiza de saturar las redes con bandas que son una copia de otra, siempre he dicho que todos buscamos imitar los sonidos que nos gustan y dentro de esa imitación, ya sea consciente o inconscientemente vamos agregando sonidos y formas propias de nuestros gustos para darle vida a una expresión de nuestro ser en la canción, pero si vamos a poner otra banda con un bosque de portada, con letras tontas o de difícil entendimiento y con los mismos riffs de siempre sin arriesgar nada entonces ahorrémonos la etiqueta de “nacionalista” o “patriótico”.

La invitación que hago es simple, nútranse de toda la música que puedan escuchar, como dije en un principio, jamás me había sentido tan alejado de la música que amo y es que considero que el metal actual ha perdido su musicalidad convirtiéndose en un caldero hirviente de técnicas que no van a ningún lado sin alma (actitud) ni trascendencia. No quiero recurrir a copiar lo viejo porque a pesar de ser grandioso, lo fue porque estuvo en el momento justo, ahora nos toca a nosotros mostrar nuestra actitud al mundo y en el metal moderno no lo encuentro, por eso llamo al músico que reside en los lectores y busquen dentro de todos los estilos la musicalidad perdida en el metal. Aprendan lo que la música tiene para enseñarles, ya sea, blues, jazz, folklore, boleros, valses, ritmos latinos, punk, etc. Sus progresiones, la forma en que se estructuran, sus arreglos, sus acordes, siempre hay algo que aprender y que nos gustará para usarlo en nuestras propias canciones y así conseguir el tan anhelado sonido propio, esa es nuestra actitud llamada sinceridad, evoluciona tu propia música e inspira a los demás, retoma el corvo, el puma y al cóndor como tus símbolos, lleva por estandarte tu individualidad y muéstrale al mundo a los niveles que puedes llevar el metal negro chileno. Recuerda que tu tierra no es solo la foto de un bosque que se parezca a los bosques noruegos, tu tierra también son las calles donde pasas, los barrios, la gente con la que convives, la forma en como los chilenos nos relacionamos unos con otros, nuestra forma de hablar y como vives y sientes esta existencia, que todo esto y más quede plasmado en la música que haces para así por fin tener un verdadero Metal negro patriótico nacional.

 

Escrito por T.S. Mortis